Por invitación de la Biblioteca Vasconcelos,
Ariel Guzik dialogará con Benjamín Mayer Foulkes sobre
Un proyecto de comunicación con cetáceos
en ocasión de su aceptación del
Doctorado Honoris Causa por 17, Instituto de Estudios Críticos.
17:00 hrs.
Actividad pública, abierta y gratuita.
Sede: Biblioteca Vasconcelos (Buenavista)
Eje 1 Norte Mosqueta s/n esquina Aldama
Col. Buenavista, Cuauhtémoc, Ciudad de México.
http://www.bibliotecavasconcelos.gob.mx/
Ariel Guzik (Ciudad de México, 1960) es músico, investigador, artista, iridólogo, herbolario e inventor. Es el fundador del Laboratorio de Investigación en Resonancia y Expresión de la Naturaleza, espacio cuyo trabajo se inspira en la ciencia ficción, se fundamenta en la física clásica y explora de manera libre, desde hace más de 25 años, los fenómenos de la resonancia, la mecánica, la electricidad y el magnetismo como base para la invención de mecanismos que dan voz a la naturaleza a través de la música. Sus investigaciones reflejan una íntima necesidad de propiciar el encantamiento del mundo, pues intenta preservar misterios en lugar de descifrarlos y privilegia la percepción de los acontecimientos naturales desde los sentidos, la fascinación y la fantasía. Ha participado en múltiples exhibiciones a nivel nacional e internacional. Representó a nuestro país en la 55ª Bienal de Venecia en 2013 y en 2015 fue nominado al Prix Ars en la categoría de Visionary Pioneers of Media Art. Desde 2007, Guzik ha sostenido, en media docena de sedes y ocasiones, un creciente diálogo público con, y desde, 17, Instituto de Estudios Críticos. A lo largo de estos ocho años, la valoración de su pensamiento y quehacer ha crecido en el Instituto tanto como en el resto del país y allende nuestras fronteras. Al recibir el ofrecimiento de un Doctorado Honoris Causa, respondió muy característicamente que deseaba que tal distinción fuese el resultado de una colaboración ampliada. De modo que a lo largo del último año y medio hemos profundizado en la comprensión de sus proyectos, motivos y horizontes. Eso nos ha permitido atestiguar cómo su itinerario ha desembocado recientemente en un significativo punto de inflexión. Enfilado desde hace tiempo hacia la concreción de un vehículo submarino tripulado, La nave narcisa, y en la realización de una serie de expediciones con la cápsula Nereida, Guzik ha ido abriendo brecha en su búsqueda de comunicación con grupos cetáceos den el pacífico. En los últimos meses ha construido junto con su equipo de colaboradores una segunda versión de la cápsula Nereida, y hoy consolida una nueva máquina, la cápsula Holoturian, que portará una planta viva como embajadora al mar profundo. De este modo, Nereida II y Holoturian se han revelado como tentativas intermedias y necesarias en la desembocadura final hacia la prevista Nave narcisa. De todo eso hablaremos. Como también de aquella ocasión memorable, hace apenas un año, en que, con ayuda de la Nereida I, Guzik convocó a todo un ensamble de especies a dialogar durante diecisiete horas en aguas costarricenses. Todo eso celebraremos, y más.