Posuniversidad

Una de las descripciones más socorridas para describir la praxis crítica generativa del Instituto ha sido la de “posuniversidad”. En seguida, algunos pasajes al respecto: 

«existe un espacio contrahegemónico de las humanidades, que siempre han estado relacionadas tanto a una vida cultural y artística intensa, como a movimientos políticos y sociales. Bajo esta égida han surgido esfuerzos públicos y privados en las humanidades que buscan extraerlas de las ideas tradiciones y disciplinares de la producción cultural (…) para imaginar espacios alternativos y modelos transdisciplinarios. (…) una institución modélica, 17 (…) se define como una ‘posuniversidad, situad[a] en el cruce de sendas de la academia, la cultura y el psicoanálisis’. (…) Gracias a las flexibilidades de este modelo, 17 ha sido una de las instancias desde las cuales se promueven formas de avanzada de las humanidades, en temas como los estudios post-humanísticos, la relación entre arte y tecnología, el pensamiento estético y político, los estudios de discapacidad, entre otros.» Sánchez Prado, Ignacio. Determinadas por paradojas: las humanidades en México. World Humanities Report, CHCI, 2022, consultable aquí.

La posuniversidad radica en invertir el vector ordinario de la universidad. En ese sentido, incluso, se vuelve una antiuniversidad, como dice Lacan en un momento dado de la antifilosofía, porque en vez de que el saber se dirija a lo residual, el residuo interpela al saber. Esto, en términos del vocabulario de los discursos, genera una doble variante que hemos explorado de manera recurrente. (“17, Archipiélago. Entrevista con Benjamín Mayer Foulkes” por Patricia Quintana, Rialta, México, 14 de junio de 2022, consultable aquí.)

A diferencia de la universidad, que suele buscar una relación positiva con los distintos conocimientos a través de los cuales quiere aprehender y dominar la realidad, la posuniversidad da lugar a lo negativo y lo imposible. No es el lugar del saber sino el de su interpelación. (Ángeles Smart, “17, Instituto de Estudios Críticos: Vino nuevo en odres viejos”, 2020, publicada en el portal editorial Diecisiete, consultable aquí.)

Si la universidad virtualizada en esos términos se vuelve completamente consonante con el productivismo de los aires neofascistas contemporáneos, la posuniversidad, en cambio, se presenta como una instancia de institucionalidad crítica en donde el cuerpo social puede respirar, puede preguntarse por su propia existencia y puede generar alternativas”. (“Necesitamos instituciones críticas. Manifiesto por la posuniversidad”, conferencia presentada por Benjamín Mayer Foulkes en el marco del Festival El Aleph de la Universidad Nacional Autónoma de México, el 29 de mayo de 2020, en línea, consultable aquí.)

If, for structural reasons, the illusions of Absolute Knowledge still lurk beneath the University (as annotated in Lacan’s respective Discourse: S2 —> a), the point of departure of the post-University (as based on the Discourse of Deconstruction: a —> S2) is the very impossibility of Absolute Knowledge. (“Towards the Post-University: Experimenting with Psychoanalysis and Institutions” Gabriela Méndez Cota interviews Benjamin Mayer Foulkes, Culture Machine (GB), vol. 15, 2014, consultable aquí.)

En seguida, algunas referencias complementarias: 

“On Deconstruction as a Social Bond: Field notes on 17, Institute of Critical Studies”, video de la presentación de Benjamín Mayer Foulkes en el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Columbia auspiciada por Claudio Lomnitz el 16 de noviembre, 2022, aquí

“¿Es practicable la desconstrucción como lazo social?” (2022), la psicoanalista uruguaya Ana Hounie toma a cargo el papel de +1 frente al testimonio del recorrido de 17 brindado por Benjamín Mayer Foulkes durante el XXXIII coloquio internacional del Instituto, “Archipiélago crítico”, el 5 de julio, 2022, video aquí.

“La universidad sin condición, diálogo de Andrés Gordillo López con Benjamín Mayer Foulkes” en el marco del programa La Gallina Ciega de 17, Radio, el 19 de agosto, 2022, audio aquí.

«El Juego de los abalorios. Historia, crítica y posuniversidad.» Una entrevista de Andrés Luna y Juan Aurelio Fernández Meza con Benjamín Mayer Foulkes 31 de marzo de 2021, en 17, Radio, audio aquí.

“El arte de desaprender”, conferencia impartida por Benjamín Mayer Foulkes en la Fundación Cisneros, Caracas, el 7 de noviembre de 2014, video aquí.

Versión portuguesa de la intervención llevada a cabo por Benjamín Mayer Foulkes  el 24 de septiembre, 2011, en la jornada: “Historia del psicoanálisis en México: pasado, presente y futuro”, coordinada por Martha Reynoso, en el Instituto de Derecho de Asilo, A.C. / Museo Casa León Trotsky, publicada en 2018, texto aquí.

Mayer Foulkes, Benjamín. “17, Institut d’Études Critiques” trad. Albert Bensoussan, Rue Descartes, n° 57, 2007/3, pp. 119 – 121, texto aquí.

Referencias

A lo largo de los años, diversos autores han referido públicamente al Instituto: 

Néstor A. Braunstein, “En el vigésimo aniversario de «17, Instituto de Estudios Críticos» (2001-2021)”, Guaraguao 26, no. 70 (2022): 27–30:

La historia en la que estamos incluidos está dominada por la actividad, esta sí, no calculada, de una “inteligencia artificial”, carente de metas y objetivos pero capaz de transformar el mundo en los aspectos físicos del planeta, ecológicos de las especies vivientes y del clima, sociopolíticos de las masas y de las naciones, subjetivos en los usuarios de estos medios profundamente a-dictivos (en un doble sentido: adictivos y supresores de cualquier dicción), cumpliendo con el programa aparentemente impersonal de “cambiar la mente de las personas”.
(…)
En este panorama no exento de tintes aterradores y apocalípticos, es donde se implanta, según creo, el programa y el proyecto de “17, Instituto de Estudios Críticos”. Volviendo con el debido reconocimiento a los profetas de la sospecha: Marx y Nietzsche y Freud, nacidos en el siglo XIX, desarrollando las tomas de posición y de partido en el siglo XX de Gramsci, Adorno, Horkheimer, Marcuse, Lacan, Foucault y Derrida (sin descartar la ambigua pero no por ello menos esencial presencia de Heidegger) se configura un espacio en el cual se despliega un discurso interdisciplinario para interrogar y dar respuesta a las incertidumbres de nuestra centuria. Como necesariamente debe ser, es un delta en el que confluyen todo tipo de actividades derivadas de ese pensamiento crítico, lo que implica que sea también un escenario para el planteo de divergencias entre los colaboradores. Al igual que en su antecedente francofortés no hay lugar en “17” para el dogmatismo o para las síntesis simplificadoras.
“17, Instituto” es criatura del siglo XXI: por eso el psicoanálisis es una parte esencial de su programa de investigación, precisamente como arma para desactivar la pretensión “científica” (en verdad, cientificista), dominante en la institución universitaria, de suprimir al sujeto. Es por su resistencia a la noción hoy imperante de la “ciencia” que el psicoanálisis es perseguido y que se procura su expulsión de los programas y “carreras” de las universidades, justamente  en nombre de esa cosmovisión  en la que Freud quería insertar a su investigación y su clínica del inconsciente. No se trata solo de abrir camino al psicoanálisis sino de mostrar como este está imbricado con las propuestas filosóficas, artísticas, políticas y económicas que se ocupan de esa subjetividad que la ideología científica pretende suprimir, tachando el estudio y la aplicación del saber derivados de la obra de Freud y de la enseñanza de Lacan como “pseudociencia”.
“17…”, a su vez, con sus múltiples conexiones internacionales, ha sido y es una institución profundamente arraigada en México. Ofrece una modalidad única, extrauniversitaria, autocalificada de “posuniversitaria”, para participar en la vida intelectual y cultural del país. Quizás “17” no sea “posuniversitaria” sino, concretamente, la “universidad sin condiciones” con la que soñaba Jacques Derrida. La lúcida propuesta de “17”, según entiendo, es la de una abstinencia crítica frente a los llamados a integrarse en bandos populistas o elitistas. Ofrece así la mejor contribución que puede hacerse con vistas a la convivencia cívica imprescindible para la vida nacional.

Susan Antebi y Beth E. Jörgensen, Libre Acceso, Latin American Literature and Film Through Disability Studies, SUNY Press, Nueva York, 2016, p. 6-7: 

In January of 2013, the editors were invited by Benjamín Mayer Foulkes and Beatriz Miranda to speak at a colloquium at the 17, Instituto de Estudios Críticos in Mexico City, with the title “De cómo la discapacidad entrecomilla a la normalidad” (…) The event brought together more than twenty scholars of disability studies and related fields, as well as artists, writers and activists, with a high level of public attendance. That such an event took place, and included, Mexican, Latin America, and a few Anglo-American disability studies scholars, attests to the internationalization of the field, and to a growing interest of disability studies in Mexico. (…) The space of the colloquium allowed for a questioning of the parameters of what constitutes “disability” and “disability studies” and required participants to continually shift disciplinary languages in order to engage in effective dialogue with one another. This event thus demonstrated how focus on disability means working within and beyond the confines of the academic sphere, in ways specific to day-to-day embodied experience and physical space.

Sergio González Rodríguez, “Estudios críticos”, en Enfoque, periódico Reforma,1o de diciembre, 2013, p. 16: 

17, Instituto de Estudios Críticos (fundado y dirigido por Benjamín Mayer Foulkes), organismo académico de alcance internacional y al mismo tiempo un foro de excepción para incubar proyectos y programas de estudio que ensamblan la teoría, el psicoanálisis y el concepto de acontecimiento, publica su libro-revista Tráficos, cuyo ejemplar más reciente ofrece textos para comprender la realidad y sus fenómenos urgentes.

Marcela Quiroz Luna: “Sobre 17 (en) obra”, entrada en su blog “Falla de cortante” el 23 de enero, 2012: 

La sola intención por pensar en 17 como se aproxima uno a una obra, supondría, por principio, colocar en el arte una importante apuesta de esperanza. Esa misma esperanza por la que Theodor W. Adorno –a pesar de creer, en alguna devastada medida, que efectivamente después de Auschwitz era ya imposible escribir poesía– continuó, sin embargo, escribiendo sobre los acordes fundantes de Beethoven y las palabras desiertas de Celan.
Intuyo así que aquella urgencia –acaso aún más íntima que ‘institucional’– que me entregó en las manos Benjamín Mayer una tarde hace no muchos jueves, apelaba a esa misma y precisa esperanza –radical hasta la médula– que finca en el arte su último y definitivo bastión. Esa tarde, a diez años de historia del 17, Instituto de Estudios Críticos, su fundador hablaba (utilizando conceptos derivados del mundo de la música, respondiendo a su formación/pasión como jazzista) [hablaba] de la necesidad de reconocer ese acorde compartido que, aún cuando silencioso o ensordecido, anima el encuentro entre una obra y su creador. Ese acorde que él mismo hace más de una década concibió como una ‘máquina productora de silencio’ consumada en el tenderse de sí como lazo social.[1] Una máquina –nunca solo individual– ejercitándose en la aventura inter e intra-disciplinar preocupada (es decir, de antemano ocupada por atender ese lugar-en-escucha al cuerpo del otro, el par); preocupada por poner en marcha una discursividad situada al cruce de los caminos académico, cultural y psicoanalítico.

Bruno Bosteels, Marx and Freud in Latin America. Politics, Psychoanalysis, and Religion in Times of Terror, Verso, Nueva York, 2012, p. 30: 

One of the most interesting recent projects in this regard is the creation of 17, Instituto de Estudios Críticos, named after the original street number of the Frankfurt School before their exile to New York City and directed in Mexico City by the Lacanian psychoanalyst Benjamin Mayer Foulkes. This Institute’s definition of “critical studies” seems perfectly appropriate for what I am calling “critical theory” as the approach used in the present book, except to say that I do not really include Nietzsche: “The outcome of the contributions made by those three masters of suspicion that are Freud, Nietzsche, and Marx, as well as by their contemporary intellectual inheritors, critical studies are concerned with social and cultural life. They distinguish themselves by their commitment to the events of their time and by their inter, trans, or postdisciplinary nature and their orientation with regard to three principal topics: subjectivity, language, and hegemony. Not only do they deal in innovative ways with inherited objects of knowledge, they also produce a critical inventory of traditional forms of knowledge and practice while tracing new lines of interrogation.

Ilán Semo, “Sobre la crítica a la modernidad”, La Jornada, 23 de julio de 2011: 

En su década de existencia el IEC se ha transformado si no (todavía) en un referente, sí en una referencia indispensable del estado actual de la teoría crítica. Cientos de alumnos han pasado por sus aulas virtuales (no es una metáfora, toda la operación pedagógica tiene su sede en soportes digitales), que hoy definen un espacio de reflexión entre la academia y los lugares en los que la sociedad concentra las labores de la crítica. Un territorio extraordinariamente difícil y complejo de ejercer, pero que se ha revelado como una franja que ha acabado por producir algunas de las formas y versiones más explosivas del pensamiento social del siglo XX.

A lo largo de los años, el Instituto ha demostrado su viabilidad no sólo intelectual, sino también operativa y económica: históricamente, se ha sostenido de manera predominantemente autónoma.  También ha recibido apoyos financieros de parte algunos donadores privados, así como también de fundaciones e instancias como:

  • The Pollination Project (Reino Unido)
  • Social Sciences Research Council (Canadá)
  • Centro Nacional de las Artes (México)
  • Centro Cultural de España (México)
  • Centro de la Imagen (México)
  • Universidad de Aberdeen (Escocia)
  • Embajada de España en México
  • Embajada de los Estados Unidos de América en México
  • Embajada de Francia en México
  • Fundación Cultural de la Ciudad de México
  • Fundación Ford México y Centroamérica
  • Patronato Arte Contemporáneo (México)
  • Yad Vashem México
  • Fundación Sasakawa (Japón)
  • British Council Canadá
  • British Council México