En esta charla consideraré el significado de visualizar el mundo “después de la extinción”: la extinción no como un tiempo en el que han desaparecido varias especies (incluyendo aquella a la que más nos apegamos de un modo narcisista, la nuestra) sino como un tiempo en el que la extinción constituye el horizonte conceptual y visual de la mayoría de los ciudadanos globales. Tomaré este horizonte como un punto de referencia para pensar la ontología fotográfica y su agencia: lo que la fotografía puede hacer con el mundo, lo que puede iluminar, y el papel que tiene la luz a través del lente fotográfico a la hora de aproximarnos a cuestiones de vida y muerte en escala planetaria. Partiendo de una consideración de la historia de la fotografía como parte de la historia natural/cultural de nuestro planeta, trazaré paralelismos entre fotografía y fósiles, y leeré la fotografía como un proceso de fosilización lumínica en diferentes medios. Desde esta perspectiva, la fotografía contiene un registro material de la vida, y no solamente una huella de memoria. Pero también volveré al origen de la fotografía como un tratamiento de la luz solar a fin de explorar la medida en que la práctica de la fotografía puede decirnos algo acerca de las fuentes de energía, y de nuestra relación con la estrella que nutre a nuestro planeta. Haré esto con ayuda de fotógrafos que deliberadamente han adoptado el horizonte de la extinción como su espacio de trabajo, desde el geólogo-fotógrafo del siglo XIX William Jerome Harrison hasta artistas contemporáneos como Hiroshi Sugimoto. También revisaré prácticas en las que el trabajo del sol ha sido un tópico y un medio, incluyendo la práctica post-digital de Penelope Umbrico.