Rabino de la Comunidad Israelita Sefaradí de Chile, desde 2006. Además de una prolífica actividad comunitaria, trabaja fuertemente en temas de diversidad e inclusión. Su casa y comunidad son frecuentes espacios de diálogo y encuentros. Fue el primer presidente de la ADIR, Asociación Chilena para el Diálogo Interreligioso y el Desarrollo Humano, la cual aglutina a representantes de un abanico de más de 16 religiones y espiritualidades presentes en Chile.
Egresó del Seminario Rabínico Latinoamericano y cursó la maestría en Talmud y Halajá en el Schechter Institute de Jerusalem. Desde joven estuvo vinculado a la educación judía, inició su carrera docente a los 18 años de edad, al igual que siendo jazán (cantante litúrgico) de la Comunidad Israelita del Oeste (Morón-Argentina). A los 25 años fue nombrado Director del Colegio Jaim Weitzman en Corrientes-Argentina. Finalizados los estudios rabínicos, fue Rabino Jefe de la comunidad judía de El Salvador, entre 2002 y 2005, donde creó el proyecto “Interpretación bíblica a través del arte” y, junto a este, un taller de prevención de violencia por medio del arte en las cárceles, trabajando en conjunto con el Ministerio de Seguridad Pública de El Salvador. Fue también miembro de la Mesa de Trabajo para la Prevención de la Violencia – PNUD (El Salvador).
En Chile es miembro de la ADIR; miembro del Consejo de Rabinos de Chile, perteneciente al movimiento masortí; miembro fundador de RILEP Chile (Red Interreligiosa de Educación para la Paz); y miembro de Religions for Peace. Así también es miembro fundador del Consejo Asesor Interreligioso de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos (ONAR), dependiente de la División de Relaciones Políticas e Institucionales del Ministerio Secretaría General de la Presidencia de Chile. De allí es coautor del Código de Ética para la Convivencia Democrática – ONAR